Por: Redacción Criterio Diario / Foto: Google Maps
La Comisión de Derechos Humanos del Estado de Puebla (CDH) comprobó que los días viernes, sábados y domingos del año 2019, se realizaron fiestas en el Centro de Readaptación Social de Puebla (CERESO) en donde se permitió por parte de las autoridades penitenciarias, que acudieran mujeres presas al área masculina de la cárcel a cambio de dinero.
Según la CDH, señalan que las fiestas eran realizadas por reos, con plena conciencia de las autoridades del Penal de San Miguel, sin que fueran supervisadas, por lo que la integridad y seguridad de las mujeres presas estaba en riesgo.
Además, se acreditó que los menores de edad que viven con sus madres en el reclusorio no recibieron servicios de salud, educación y alimentación, los cuales son necesarios para su desarrollo.
Por lo tanto, la Comisión recomendó al titular de la Secretaría de Seguridad Pública Raciel López Salazar, iniciar una investigación de los hechos ocurridos en 2019 para dictar responsabilidades administrativas en contra de los funcionarios involucrados en los hechos.
