Por: Redacción Criterio Diario / Foto: Twitter @IPN_MX
La Asociación Nacional de Escuelas Particulares de la República Mexicana (ANFE-ANEP) declaró que debido a los más de 10 meses que lleva la suspensión de clases presenciales en escuelas de nivel preescolar y básico en México debido a la emergencia sanitaria por COVID-19, ha tenido gran repercusión negativa en el sector privado.
Esto se ve reflejado en números, ya que de los 48 mil centros educativos que hay en el país, al menos 18 mil cerraron de forma definitiva; es decir, 37.5 por ciento. En cuestión de alumnado, el sector privado tenía 5.5 millones de estudiantes antes de la pandemia, aproximadamente 2.3 millones abandonaron las escuelas privadas para continuar sus clases en escuelas públicas, representando a más del 40 por ciento de alumnos.
Las cifras han puesto en riesgo el empleo de cerca de 200 mil trabajadores de le educación privada, entre maestros y administrativos.
Alfredo Villar, Presidente de la ANFE-ANEP, solicitó a la Secretaría de Educación Pública (SEP) para platicar sobre cuando pueden reanudar actividades las escuelas privadas, con la intensión de finalizar el ciclo escolar 2020-2021 en las aulas, cumpliendo los protocolos de higiene y evitar la propagación del coronavirus y así evitar el cierre de más planteles.
Villar expone que las autoridades no pueden suspender el derecho a impartir educación ni a recibirla; ante esta premisa afirmó que están decididos a abrir sus puertas en febrero próximo, entendiendo que tendrán que recurrir a medios legales.
“Se trata de llegar a acuerdos con las autoridades para poder abrir, tenemos el derecho de hacerlo. El Estado de Derecho está de nuestra parte y lo vamos a hacer valer a través de amparos. Pero de que abrimos, abrimos”.
Esta decisión se ha tomado ya que el 65 por ciento de los padres de familia están dispuestos a enviar a sus hijos a clases presenciales y el 35 por ciento que resta puede continuar con clases en línea.
Y aunque el Presidente de la ANFE-ANEP tiene claro que aún hay varias partes del país con semáforo epidemiológico color rojo, la reapertura económica se está dando con todas las medidas sanitarias solicitadas, por lo que insiste en que las escuelas particulares pueden retomar labores de manera presencial, ya que consideran que la educación es una actividad esencial.
“Es el momento de que se nos tome en cuenta en la toma de decisiones y se nos reconozca como parte integral del sistema educativo nacional, por esta razón, exhortamos al gobierno que nos proporcione las vacunas para los docente y personas de los colegios particulares”.
Por otra parte, solicitan al Sistema de Administración Tributaria (SAT) ha que de facilidades y no presionar a las escuelas privadas a pagar impuestos como si estuvieran operando de manera normal.
“Exigimos al SAT que dé todas las facilidades y no esté presionando como lo está haciendo. Las escuelas son no contribuyentes de ningún impuesto ya que la educación no es una actividad mercantil, así lo establece la ley general de educación, entonces no puede haber utilidades, sólo cuando se tienen utilidades es cuando se pagan los impuestos, entonces el SAT debe detenerse en estas presiones que están haciendo a las escuelas particulares”.