Por: Redacción Criterio Diario/ Foto: Carlos Vázquez
El Gobernador de Puebla Luis Miguel Barbosa Huerta dio autorización para que el pasado viernes 23 de abril se permitiera el ingreso de la afición para el juego Puebla contra UNAM, esta decisión dijo el Gobernador, se tomó debido a que los contagios por COVID-19 han ido a la baja y no se tiene visibilidad sobre una tercera ola, por lo tanto instruyó a Protección Civil del Estado (PCE) para que alistara los protocolos necesarios para la reapertura del estadio.
Sin embargo a la entrada se vieron largas filas que seguían incluso minutos después de iniciado el encuentro, se hicieron pruebas PCR al 10% por ciento de los aficionados, no se permitió la venta de alcohol o cerveza y el Club Puebla publicó un comunicado con los lineamientos que los aficionados tendrían que seguir antes, durante y después del partido.
Ante la asistencia de unos 15 mil aficionados y pese a los esfuerzos de la autoridad y del personal del Club Puebla, respetar la sana distancia fue complicado sobre todo en la filas de entrada y en los baños aunque cabe destacar que en las tribunas la mayoría de la gente respetó las medidas. Esta primera experiencia de reapertura dejará varios puntos por mejorar si es que se decide seguir recibiendo afición en los partidos de liguilla durante el siguiente mes.
Finalmente en el regreso de la afición al estadio Cuauhtémoc, el Puebla de la Franja no pudo sacar la victoria empatando sin goles ante unos Pumas de la UNAM que estaban obligados a buscar la victoria para poder mantenerse en zona de repechaje. En la parte final del partido hubo una riña en la zona de la porra de los universitarios que el personal de seguridad tardó varios minutos en controlar, se pueden ver imágenes en redes sociales de un hombre que patea a una mujer mientras los hechos daban lugar atrás de una de las porterías del estadio.
