Por: Redacción Criterio Diario/ Foto: Reuters
El Presidente de Estados Unidos Joe Biden, ha dicho que espera publicar los resultados de un informe de inteligencia sobre los orígenes del virus.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de China acusó a Estados Unidos de “manipulación política y cambio de culpa”. Ha rechazado cualquier vínculo entre COVID-19 y un laboratorio de investigación de virus en la ciudad china de Wuhan.
¿Por qué se toma en serio la teoría de las fugas de laboratorio?
El COVID-19 se detectó por primera vez en Wuhan a fines de 2019. Desde entonces, se han confirmado más de 168 millones de casos en todo el mundo y se han informado alrededor de 3,5 millones de muertes.
Las autoridades vincularon los primeros casos de COVID con un mercado de productos del mar en Wuhan, lo que llevó a los científicos a teorizar que el virus había pasado primero a los humanos a través de los animales.
¿Por qué ocurre esta disputa ahora?
En un comunicado el miércoles 26, el Presidente Biden dijo que había pedido un informe sobre los orígenes del COVID-19 después de asumir el cargo, “Incluyendo si surgió del contacto humano con un animal infectado o de un accidente de laboratorio”. Al recibirlo este mes, pidió un “seguimiento adicional”.
Biden dijo que la mayoría de la comunidad de inteligencia se había “unido” en torno a esos dos escenarios, pero “no cree que haya suficiente información para evaluar que uno sea más probable que el otro”. Dijo que ahora había pedido a las agencias que “redoblen sus esfuerzos para recopilar y analizar información que nos pueda acercar a una conclusión definitiva”.
El jueves 27, Biden dijo a los periodistas que planeaba publicar el informe “a menos que haya algo de lo que no se tenga conocimiento”.
El anuncio del miércoles enfureció a los funcionarios chinos.
El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Lijian Zhao, dijo que se mostraba que a Estados Unidos “no le importan los hechos o la verdad, y que no tiene ningún interés en un estudio serio de los orígenes basado en la ciencia”.
“Su objetivo es utilizar la pandemia para perseguir la estigmatización, la manipulación política y el cambio de culpa. Están siendo irrespetuosos con la ciencia, irresponsables con la vida de las personas y contraproducentes para los esfuerzos concertados para combatir el virus”, dijo.
El portavoz también dijo que las agencias de inteligencia estadounidenses tenían una “oscura historia” de difusión de información errónea.
Una declaración de la embajada de China en Estados Unidos, que no se refirió directamente a la orden de Biden, dijo que “las campañas de difamación y el cambio de culpas están regresando”.
¿Qué sabemos sobre la teoría del laboratorio?
Las especulaciones sobre el Instituto de Virología de Wuhan, uno de los principales laboratorios de investigación de virus de China, comenzaron el año pasado y fueron propagadas por Trump.
Salieron a la luz en abril de 2020 que mostraban que los funcionarios de la embajada estaban preocupados por la bioseguridad allí.
A principios de este año, la Organización Mundial de la Salud (OMS) emitió un informe escrito en conjunto con científicos chinos sobre los orígenes de COVID-19 que decía que las posibilidades de que comenzara en un laboratorio eran “extremadamente improbables”.
Dijo que el virus probablemente había pasado de los murciélagos a los humanos a través de otro animal intermediario, pero que se necesitaba más investigación.
Un portavoz de la OMS reiteró el jueves que se necesitan más estudios “en una variedad de áreas, incluida la detección temprana de casos y conglomerados, y el papel potencial de los mercados de animales, la transmisión a través de la cadena alimentaria y la hipótesis de incidentes de laboratorio”.
La teoría del laboratorio ha recibido una mayor atención pública en los EE. UU. En medio de informes recientes atribuidos a fuentes de inteligencia que dicen que tres miembros del Instituto de Virología de Wuhan fueron ingresados en el hospital en noviembre de 2019, varias semanas antes de que China reconociera el primer caso de la nueva enfermedad en el país.
Anthony Fauci, el principal asesor médico del presidente Biden, ha sostenido que cree que el virus se transmitió de animales a humanos, aunque admitió este mes que ya no confiaba en que el COVID-19 se hubiera desarrollado de forma natural.
La orden de Biden de realizar más investigaciones se produjo un día después de que Xavier Becerra, secretario de salud y servicios humanos de Estados Unidos, instara a la OMS a garantizar una investigación “transparente” sobre los orígenes del virus.
“La fase 2 del estudio de los orígenes de COVID debe iniciarse con términos de referencia transparentes, basados en la ciencia y que brinden a los expertos internacionales la independencia para evaluar completamente la fuente del virus y los primeros días del brote”, dijo.
