Por: Redacción Criterio Diario / Foto: Twitter @e_consulta
Este jueves 28 de octubre, la familia Jenkins informó que un juzgado federal ordenó que le fuera restituido el control de las instalaciones de la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP) que les fue retirado en junio pasado.
La resolución fue emitida por el juez Roberto Yánez Quirós, quien ordenó hace cinco meses la destitución de los Jenkins del Patronato de la Fundación que está a cargo de la casa de estudios (FUDLAP) debido a las órdenes de aprehensión a las que se enfrentan por el delito de lavado de dinero.
De acuerdo con un comunicado emitido por la familia, la determinación deja sin efecto su destitución de la FUDLAP y el nombramiento del nuevo patronato que en junio pasado fue designado por la Junta para el Cuidado de las Instituciones de Asistencia Pública del Estado (JCIAP).
La determinación también confirma el aseguramiento que previamente se realizó de las cuentas bancarias de la Fundación mencionada y permitirá que se regularize la situación acaémica en la universidad.
El conflicto inicial en torno a la familia Jenkins tiene inició cuando el nieto primogénito de la familia, Guillermo Jenkins Landa, realizó una denuncia contra sus parientes, acusándolos de desviar 720 millones de dólares de la Fundación Mary Street Jenkins, misma que auspicia a la UDLAP, a paraísos fiscales.
