Por: Reacción Criterio Diario / Foto: Twitter: @Claudia_27P
Beberly Vega tiene 24 años, es originaria de Tierra Blanca, en el estado de Veracruz, y estudia ingeniería mecatrónica. El 21 de enero de 2022 fue detenida en Puebla después de que se defendió de un hombre que pretendía violarla. Desde entonces está en el penal de San Pedro Cholula acusada de lesiones.
Durante las manifestaciones de su familia y de activistas que exigen su liberación, el padre de la joven veracruzana, Eloy Vega, explicó que ella viajó a Puebla para estudiar y que si su hija no se hubiera defendido, estaría embolsada o desaparecida.
“Ella no vino a robar, ella vino a terminar su residencia. Pero miren dónde las está terminando”.
Beberly llegó a Puebla desde Veracruz para terminar su servicio social, trámites que tendrían que haber concluido este 30 de enero.
El 21 de enero pasado ella tomó un taxi por aplicación en Cuautlancingo para ir ver a su asesor de prácticas profesionales y finalmente poder liberar su servicio.
En el camino, solicitó terminar el viaje al chofer de Uber, éste se negó a dejarla bajar del vehículo, puso los seguros del automóvil, subió los vidrios, se llevó una mano al pantalón, sacó un cuchillo para amargarla e intentó agredirla sexualmente.
Beberly se defendió con una navaja que traía para su seguridad y logró escapar. Su agresor la persiguió y forcejó con ella; al menos tres testigos intentaron llamar al 911 al ver la agresión, pero cuando la policía llegó al lugar el hombre fingió ser el agredido y ella terminó detenida
Aunque los papás de Beberly no quisieron dar una cifra de cuánto pide su agresor por darle el perdón y que se detenga el proceso penal en su contra, algunos medios hablan de que son casi 100 mil pesos.
Este 28 de enero se llevó a cabo la audiencia en su caso, a cargo de la jueza Karla Patricia Ambrosio Vargas. De acuerdo con la colectiva Red La Morada, que ha estado pendiente y presente en la Casa de Justicia de Cholula, a Beberly le negaron el derecho de elegir a sus abogados y le impusieron un abogado de oficio.
Tras una larga audiencia, la juez de Control Karla Patricia Ambrosio tomó en cuenta criterios de perspectiva de género y subrayó que la joven estaba en una situación vulnerable, en desventaja físicamente con el conductor y amenazada en cuanto a su vida y su libertad sexual.
Determinó que Beberly acreditó la legítima defensa en sus actos, por lo que dictó la no vinculación a proceso. La joven abandonó la cárcel la madrugada de este 29 de enero.
