Por: Reacción Criterio Diario / Foto: Twitter: @Foro_TV
El esperado informe de las fiestas ocurridas en Downing Street no salió completo, pero deja en evidencia que el primer ministro, Boris Johnson y compañía no respetaron las restricciones impuestas durante la pandemia.
El lunes 31 de enero, la vicesecretaria de la Oficina del Gabinete, Sue Gray, entregó el informe sobre las fiestas realizadas en Downing Street, sede desde donde Boris Johnson, primer ministro de Gran Bretaña trabaja. Ella lo califica como una “actualización”, ya que dichas reuniones eran conocidas y posiblemente el informe completo nunca saldrá a la luz.
Lo que se sabe basta para dejar mal parado al buen Johnson y su gabinete, ya que se insinúa que hay problemas con el chupe en el llamado No. 10. “El consumo excesivo de alcohol no es apropiado en un lugar de trabajo profesional”.
Según el informe solicitado por la policía de Londres, con la realización de las fiestas se dio muestras de “fallas de liderazgo y juicio por parte de diferentes partes del (Downing Street) No. 10 y la Oficina del Gabinete en diferentes momentos”.
De acuerdo con medios internacionales, en el informe se critica la forma de actuar del gobierno de Boris Johnson durante el punto más alto de contagios durante la pandemia.
“No se debería haber permitido que se llevaran a cabo algunos de los eventos. No se debería haber permitido que otros eventos se desarrollaran como lo hicieron”.
Aunque el informe dejó mucho que desear a la oposición, se señala que contiene más de 300 fotos relacionadas con 12 fiestas que son material de investigación para la policía de Londres. Una de ellas, la fiesta de cumpleaños de Boris Johnson.
El primer ministro compareció el día lunes ante el Parlamento para dar explicaciones de lo revelado en el informe de Gray.
“Si bien la Policía Metropolitana aún debe terminar su investigación, y eso significa que no hay detalles de eventos específicos en el informe de Sue Gray, yo, por supuesto, acepto los hallazgos generales de Sue Gray en su totalidad. Y sobre todo, su recomendación de que debemos aprender de estos eventos y actuar ahora”.
Mientras que la oposición pide la renuncia de Johnson, el futuro de éste queda en manos de la gente de su propio partido, la cual puede solicitar una “moción de censura”, que significaría la salida del primer ministro.
