Los jesuitas y su vida de luchas

Angelica Lobato Torres Criterios

Como bien sabrán, recientemente asesinaron a dos sacerdotes jesuitas en Chihuahua y personalmente me dolió; no soy la persona más católica del mundo, pero mi educación en la primaria y la secundaria fue fuertemente influenciada por los jesuitas. Para mí los jesuitas tienen algo casi anti católico… o al menos así me parecían la mayoría de los sacerdotes de mi escuela; ellos te recomendaban a no quedarte con lo que te decía la iglesia o la religión, que investigaras y decidieras en lo que querías creer. Pero lo más importante que te enseñan los jesuitas, algo que me dijo tu nunca hubieras podido ser sacerdote jesuita, es el “ser para los demás”. Estos 2 sacerdotes eran el claro ejemplo de ello, ellos murieron defendiendo a alguien más, realizando su misión en un pueblo peligroso y pobre… ellos eran verdaderos jesuitas.

Los jesuitas cumplen 450 años en nuestro continente, desde que llegaron a la Nueva España su misión fue el de difundir la palabra de dios e impartir educación, hacer llegar tanto la religión como la ciencia del momento. Respetaron las tradiciones de los pueblos e incluso las documentaron y por eso son conocidas en nuestros días y por eso no me causó sorpresa ver a un gran número de personas, en sus vestimentas regionales, durante los servicios funerarios de los sacerdotes.

Lo mismo pasaba en otros continentes, como lo explica el libro “Fascinación De La Diferencia, La. La Adaptación De Los Jesuitas Al Japón De Los Samuráis 1549-1592” de Carmelo Lison Tolosana, explica como la unión de las dos culturas fue pacífico, sin humillar al nativo, ni  tratando de imponer ideas sino enseñándoles cosas nuevas de manera gradual; y de este tipo de trabajo jesuita también existe el libro “Los Saberes Jesuitas En La Primera Globalización (Siglos XVI-XVIII)” de Angélica Morales Sarabia en que explica que el trabajo de los misioneros fue, sin que se fuera consciente de ello, la primera vez que se buscaba unir a las diferentes culturas del mundo bajo el servicio de la misión que inició San Ignacio de Loyola.

“Jesuitas Y La Ciencia, Los. Una Tradicion En La Iglesia” de Agustin Udias Vallina narra como los jesuitas tienen una importancia básica en la divulgación de las ciencias naturales desde el año 1540; en el siglo XVI los jesuitas a fundaron los primeros colegios, que llegaron a ser unos 600 en Europa, América y Asia. La ciencia moderna daba entonces sus primeros pasos y los jesuitas se incorporaron en especial, en los campos de la matemática y la astronomía. Jesuitas científicos tuvieron relación con Galileo, Kepler, Huygens y Newton. Fueron los primeros en llevar la matemática y la astronomía modernas a China; llevaron a Europa el conocimiento de la fauna y la flora, y los primeros mapas de América, Asia y África.

Los jesuitas fueron reprimidos durante muchos años pero fundaron observatorios astronómicos, geofísicos y meteorológicos y hasta el día de hoy dirigen el Observatorio Vaticano. Al día de hoy hay 133 universidades y más de 400 colegios jesuitas en todo el mundo donde imparten la ciencia y la investigación científica, incluso en temas que los podrían alejar de la Iglesia.

Hay un libro que se vendía mucho durante ciertas temporadas; “El liderazgo al estilo de los jesuitas” de Chris Lowley enseña los cuatro pilares para lograr ser un gran líder: la auto-conciencia, el heroísmo, el ingenio y el ser amoroso. La importancia de conocerse a sí mismos profundamente, viven para adaptarse con seguridad a un mundo que cambia rápidamente, y respetar la dignidad y el potencial de los que les rodean. Lowney fue novicio jesuita pero dejo el seminario para entrar a una gran empresa de consultoría, aun así indica que sus logros se basaron en lo que aprendió durante su vida dentro de la Compañía de Jesús.

 Así que el mundo, en especial con el papa Francisco, va de la mano con los jesuitas; si bien no en el ámbito religioso, nuevas generaciones crecen con temas y enseñanzas que la Compañía de Jesús ha impartido durante siglos. El mundo sería mejor si pudiéramos ser para los demás, si buscáramos a Dios en las cosas que algunas veces parecen rebatir su existencia tendríamos un conocimiento más amplio de todo lo que nos rodea.

Esperemos que estos 2 sacerdotes se encuentren en verdad en un mejor lugar y que desde donde estén puedan cuidar a los miles de sacerdotes que aun buscan cuidar a sus feligreses, llevar conocimiento a los lugares más lejanos y pues ya de paso cuidarnos a todos que a nadie le sobra un poco de ayuda divina.