Por: Redacción Criterio Diario / Foto: Twitter: @jrubiomart
A los activistas ambientales de Francia no les gustó la forma en que las autoridades, ante una de las peores sequías de la historia en el país, han establecido la distribución del agua.
De acuerdo con la BBC, activistas irrumpieron en los campos de golf del sur de Francia para llenar los hoyos con cemento. Una forma de protestar ante la exención de las prohibiciones del agua que estos lugares obtuvieron para regar los campos.
“Un campo de golf sin green es como una pista de hielo sin hielo”, justificó Gérard Rougier, de la Federación Francesa de Golf.
Así que, mientras los golfistas tendrán agua para limpiar sus calcetines y mantener el verde de sus campos, alrededor de 100 pueblos de Francia carecen de agua potable.
El golf es la “industria del ocio de los más privilegiados”, señalaron los activistas que centraron sus esfuerzos en Toulouse y Blagnac.
Además de vandalizar los campos de golf, los activistas lanzaron una petición para que no hubiera exención en las medidas para sobrellevar la sequía en Francia, “la locura económica tiene prioridad sobre la razón ecológica“, ya que mientras los vecinos no tienen agua para regar sus pequeños jardines, los campos de golf tienen la suficiente para regar sus kilométricas áreas.
Aunque las prohibiciones relacionadas con el agua son a nivel nacional, se ha permitido que las autoridades dispongan de ellas a como vean. Los golfistas han librado las limitaciones por todo el país, sólo en Ille-et-Villaine, en el oeste de Francia, se ha prohibido el riego de los campos de golf.
Pese a que algunas partes del río Loira prácticamente se han secado y que en dos tercios de Francia se ha declarado el estado de crisis a lo más que se han atrevido las autoridades de muchas regiones es a pedir que los campos de golf sean regados por las noches y con sólo el 30% del volumen habitual de agua.
