Por: Redacción Criterio Diario / Foto Twitter: @Ready_Hut
El Estadio Azteca fue anfitrión para que los Arizona Cardinals “recibieran” a los San Francisco 49ers como en el 2005. Fueron tres años de espera para tener de nuevo un partido de temporada regular en México. La última vez que esto pasó fue en el 2019, cuando los Chiefs de Patrick Mahomes derrotaron 24-17 a los Chargers.
Cardinals y 49ers son rivales de división, comparten el Oeste de la Conferencia Nacional y estaban bastante parejos. Los de San Francisco tenían marca de 5-4, mientras que los de Arizona llegaron con 4 triunfos y 6 derrotas. La victoria en el Estadio Azteca era una obligación para ambos.
Los favoritos para llevarse el triunfo siempre fueron los 49’s. Kyler Murray, el QB titular de los Cardenales, se lesionó desde el encuentro contra los Halcones Marinos en la Semana 9. Arrancaron con el QB suplente Colt McCoy. Otra baja sensible fue la del ala cerrada Zach Ertz, también por lesión.
No es cosa menor como para mencionarlo porque el primer intento de los 49ers para encerrar a los Cardinals se vino abajo precisamente por lo resbaloso del campo causado por la lluvia, eso llevó a los de Arizona hasta la yarda 20 y de ahí vino la primera ofensiva que generó puntos mediante un gol de campo.
El primer touchdown del juego fue para San Francisco. Jimmy Garoppolo guió una ofensiva sostenida de 80 yardas y conectó con Brandon Aiyuk para poner el 7-3 con 13:36 por jugar en el segundo cuarto.
Se notó que SF estaba esperando a que iniciara el segundo cuarto para soltar el ataque. Los 49’s aprovecharon una intercepción en medio campo y tomaron ventaja de 14-3 con 9 minutos por jugar en la primera mitad. Parecía que Garoppolo optaría por la carrera, pero localizó a George Kittle y éste se metió a las diagonales.
Kittle fue protagonista de uno de los momentos más especiales del regreso de la NFL a México. Penta Zero Miedo le regaló una máscara con los colores de San Francisco y él no dudó en ponérsela de inmediato.
La respuesta de los “locales” llegó rápido, apenas en la siguiente ofensiva. Una jugada grande llevó a Cardinals a zona roja y no desaprovecharon. James Conner se metió por tierra a la zona prometida.
SF consiguió un gol de campo más antes de la presentación de Grupo Firme. Los 49ers se fueron al medio tiempo con el marcador 17-10.
Apenas empezó la segunda mitad y los 49ers volvieron a mostrar el músculo. Deebo Samuel se hizo una carrera de 39 yardas tras una gran jugada de engaño y se metió a las diagonales sin mayor resistencia de la defensiva rival.
Nuevamente apareció Brandon Aiyuk a pase de Jimmy G para convertir el partido en el Estadio Azteca en una auténtica paliza. Los 49ers borraron a los Cardinals en el tercer periodo y se fueron al último tramo del juego con el marcador 31-10.
San Francisco llegó nuevamente a las diagonales por tierra, con Kittle llevando el ovoide hasta la zona prometida tras recibirlo en la yarda 30 y evitar una tackleada por la banda izquierda y a falta de 2 minutos vino la cereza del pastel. Los Cardinals trataron de hacer más decorosa la derrota pero los 49ers interceptaron un pase a la zona de anotación. La segunda entrega de balón para Arizona y el punto final de una noche para el olvido en el Estadio Azteca.
La NFL regresó así a México, con un partido inolvidable, especialmente para los aficionados de San Francisco.
