Por: Redacción Criterio Diario / Foto Twitter: @bellumartis
Este 19 de octubre el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dio un discurso para explicar por qué va a pedir más dinero para enviar a Israel y Ucrania. Afirmó que la organización Hamás y el presidente ruso, Vladimir Putin, son amenazas distintas pero las dos quieren “aniquilar democracias“.
Aseveró que Hamás no representa al pueblo de palestina y que, por el contrario, lo que está haciendo es usar a los civiles como escudos humanos.
Horas antes de que este mensaje fuera transmitido, asesores del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunciaron que el objetivo era explicar al pueblo por qué necesitan enviar decenas de miles de millones de dólares en ayuda militar extra a Israel y Ucrania.
El presidente decidió lanzar este discurso desde la Oficina Oval para obtener un apoyo más amplio entre el público y en el Congreso para responder ante “las luchas que amenazan la estabilidad democrática en todo el mundo”.
Durante el discurso, Biden intentó explicar por qué Israel y Ucrania no están tan lejos como para no importarle a Estados Unidos.
“La historia nos ha enseñado que cuando los terroristas no pagan un precio por su terror, cuando los dictadores no pagan un precio por su agresión, causan más caos, muerte y más destrucción”.
Habló de solicitar un paquete de dinero, destinado a seguridad, al Congreso. Esto incluirá reabastecimientos para la Cúpula de Hierro, el sistema antimisiles de Israel. Se trata de 14 mil millones de dólares.
Al final del discurso, Biden afirmó que Estados Unidos quedó “cegado por la ira” después de lo que pasó el 11 de septiembre y que por ello cometió errores. Es por eso que aconsejó a Israel no hacer lo mismo.
