A la muerte, ni temerla ni buscarla, hay que esperarla
Ya está muy cerca la época de honrar a nuestros seres queridos que trascendieron este año o ya hace tiempo. Se dice aquí en México que ya están en camino. Preparar los altares o ofrendas para recordarlos con los alimentos, bebida y dulces que les gustaban. Ofrendar, el día de muertos es compartir con nuestros difuntos el pan, la sal, las frutas, los diversos platillos que les gustaban en vida, el agua, dulces y vino. Y no pueden faltar las flores y las velas. Ofrendar es estar cerca de nuestros muertos honrando su memoria, es dialogar con su recuerdo. Es un ritual que convoca a la memoria a saber que están presentes en nuestros corazones y recuerdos por haber formado parte de nuestras vidas.
Como Tanatóloga yo veo como parte de la terapia de Duelo el poner una ofrenda a nuestros seres queridos, es parte del proceso de aprender a vivir sin ellos recordando todo lo vivido a su lado y recordar lo que les gustaba comer y tomar.
México es el lugar donde festejamos a la muerte, esta hermosa tradición es reconocida a nivel mundial.
El altar de muertos es un elemento fundamental con el conjunto de tradiciones mexicanas. El día de muertos hasta la casa más sencilla de México tiene una ofrenda para todos aquellos que ya partieron.
Voy a compartirles un poco de fechas de esperar a nuestros muertos y cosas que deben tener las ofrendas, aunque esto depende de cada zona de la República Mexicana.
Iniciaremos con qué fecha es el primer día para poner nuestra ofrenda. La tradición apunta que llegan días antes al 31 de octubre, pero este día es el que se marca para que dé inicio la puesta de ofrendas en los hogares mexicanos.
Aunque se inicia desde el 27 de octubre fecha en la que recibimos a las mascotas y ponemos agua y vela para ellos.
El día 28 de octubre recibimos a todos los que fallecieron en un accidente poniendo en casa agua y una vela. Algunos adornan con flores el lugar donde sucedió el accidente.
El 29 de octubre se recibe a los ahogados y se pone agua y vela en su memoria
El 30 de octubre a los niños no bautizados.
El día 31 a las almas olvidadas. Este dio se ponen los altares
El día 1 de noviembre a todos los niños y jóvenes ya con la ofrenda puesta
El día 2 de noviembre se recibe a todos los Santos y ese día se recoge la ofrenda tres de la tarde según la tradición.
Ahora vamos a ver los elementos que debe tener la ofrenda, cada uno de ellos encierra su propia historia, tradición, poesía y, más que nada misticismo. Debo aclarar que estos son los elementos básicos de una ofrenda en cada zona del territorio mexicano, en algunos ponen más cosas o artículos típicos de su zona geográfica. Pero los básicos que no pueden faltar en ningún altar por sencillo que sea son los siguientes:
El agua: Simboliza la fuente de la vida, se ofrece a las ánimas para que mitiguen su sed después de su largo recorrido y para que fortalezcan su regreso.
Fotografía: Es muy importante poner la foto de nuestros seres queridos a quien está dedicada la ofrenda
La sal: El elemento de purificación, sirve para que el cuerpo no se corrompa, en su viaje de ida y vuelta para el siguiente año.
Velas y veladoras: La flama que producen significa “la luz”, la fe, la esperanza. Es guía, con su flama titilante para que las ánimas puedan llegar a sus antiguos lugares y alumbrar el regreso a su morada. En varias comunidades indígenas cada vela representa un difunto, es decir, el número de veladoras que tendrá el altar dependerá de las almas que quiera recibir la familia.
Copal e incienso: Se utiliza para limpiar al lugar de los malos espíritus y así el alma pueda entrar a su casa sin ningún peligro.
Las flores: Adornan y aromatizan el lugar durante la estancia del ánima, la cual al marcharse se irá contenta.
El pan: Es el ofrecimiento fraternal es el pan. La iglesia lo presenta como el “Cuerpo de Cristo”. Elaborado de diferentes formas, el pan es uno de los elementos más preciados en el altar.
El mole: Es el platillo principal que ponen en el altar, es el banquete de la cocina en honor de los seres recordados. La buena comida tiene por objeto deleitar al ánima que nos visita.
Las calaveras de azúcar medianas son alusión a la muerte siempre presente. Las calaveras chicas son dedicadas a la Santísima Trinidad y la grande al Padre Eterno.
Estos son los elementos más básicos de la ofrenda, espero pongan sus altares y honren la memoria de cada uno de sus seres queridos con una de nuestras tradiciones más colorida y llena de sabor que tenemos los mexicanos, la Ofrenda.
No lloramos, celebramos, porque los que más amamos no olvidamos
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