Por: Redacción Criterio Diario / Foto X: @jacksonhinklle
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, destituyó a su ministro de Defensa, Yoav Gallant, por discrepancias en la gestión de la guerra en Gaza, y nombró como su sustituto al hasta ahora titular de Exteriores, Israel Katz.
En un comunicado, Netanyahu afirmó que había “brechas significativas” entre Gallant y él en la gestión de la campaña militar en Gaza y “estas brechas fueron acompañadas de declaraciones y acciones que contradicen las decisiones del Gobierno y las decisiones del gabinete”.
Previo a su destitución del cargo, Gallant insistió en la necesidad de un “reclutamiento masivo” de jóvenes ultraortodoxos que engrosen las Fuerzas Armadas del país.
Así lo ha expresado durante una visita a la unidad del mando de élite Egoz, donde ha afirmado que “se necesitan más soldados a todos los niveles dentro del Ejército”.
Sus declaraciones llegan tan solo horas después de haber anunciado que se han emitido unas 7 mil nuevas órdenes de reclutamiento para estas poblaciones, que se niegan a sumarse a las tropas.
Gallant ha explicado que está previsto que se introduzcan nuevas medidas que incluyan un servicio militar obligatorio de tres años para los hombres, como ya sucedía en el pasado, algo para lo que será necesario “reclutar a otras poblaciones, principalmente ultraortodoxos, a gran escala”.
Se estima que 60 mil jóvenes ultraortodoxos son reclutables, si bien hasta el momento solo 3 mil aproximadamente podrían entrar en el Ejército antes de finalizar el año a pesar de que las autoridades hayan reconocido que son necesarios 10 mil nuevos efectivos, en su mayoría tropas de combate.