Por: Redacción Criterio Diario / Foto: Twitter: @infobaemexico
Las series de temporada regular de la MLB volverán a México en 2023. Pero ahora llegó el momento de jugar en la Ciudad de México, así que los San Diego Padres y los San Francisco Giants se enfrentarán el 29 y 30 de abril en el Estadio Alfredo Harp Helú.
Anteriormente, las Grandes Ligas pisaron territorio mexicano fue en Monterrey. Y si la sede cambió, es consecuencia de una serie de factores que los organizadores detectaron durante los últimos años.
Rodrigo Fernández, director de MLB México, declaró en entrevista que desde la nueva casa de los Diablos Rojos del México, hasta el interés en acercar a estas franquicias a los mexicanos, las series van que vuelan para ser un éxito.
Si bien es cierto que el estadio es clave para recibir a la MLB en países fuera de Estados Unidos y Canadá, no es el único requisito que se toma en cuenta. México cuenta con tres sedes potenciales para series en los próximos años; sin embargo, el Alfredo Harp Helú sí jugó un papel muy importante en la elección.
“En México claramente, la Ciudad de México, Monterrey y Guadalajara son los mercados más fuertes con el tema de eventos; tienen la mejor infraestructura además. A nosotros nos gustaría ir a muchas ciudades, desafortunadamente no todas las ciudades cuentan con la infraestructura, empezando por el parque. Luego hay una serie de cosas como los hoteles, por ejemplo“.
La casa de los Diablos Rojos del México abrió sus puertas en 2019. Cuenta con capacidad para más de 20 mil 500 aficionados y presume su tecnología con pantallas gigantes, así como ser amigable con el medio ambiente al recolectar agua de lluvia y tener pasto sintético.
“De entrada, ven el crecimiento que ha tenido la MLB en México en los últimos años. Y después, lo ven por el lado de ganar aficionados mexicanos“.
México se caracteriza por recibir calurosamente a cualquier equipo, así que los directivos de la MLB quedaron maravillados con su visita al Estadio Alfredo Harp Helú en la serie de campeonato de la Zona Sur.
“Se llevan una sorpresa importante porque el béisbol se vive de una manera muy distinta. Tuvimos la oportunidad de estar en el partido entre Diablos y Leones… aquí somos ruidosos, hay banderas. Ellos estaban admirados de lo que estaba pasando, es una fiesta distinta y creo que eso les llama la atención a directivos y jugadores“.
