Por: Redacción Criterio Diario / Foto Twitter: @michangoonga
El 27 de agosto diversas zonas de Michoacán despertaron en medio de la violencia. Criminales incendiaron desde Oxxos hasta autos para bloquear carreteras y generar terror en lugares como Uruapan, Apatzingán y Buenavista.
En redes sociales se compartieron fotos y videos de la forma en que el crimen organizado dio una muestra más de impunidad en Michoacán. Es posible que esta nueva afrenta tenga algo que ver con un enfrentamiento contra fuerzas de seguridad un día antes.
Dos tiendas Oxxo fueron quemadas por integrantes del crimen organizado en Apatzingán; también quemaron al menos tres autos con el fin de provocar bloqueos, una práctica que se ha vuelto común en varios estados del país donde el crimen organizado opera y mantiene control.
Por fortuna las dos tiendas estaban vacías, pero los bloqueos se extendieron hasta Buenavista y en Uruapan también quemaron un camión comercial y otra tienda de conveniencia; diversas negocios de la zona de plano cerraron sus puertas ante el temor ser atacados por los grupos criminales, tal como sucedió a principios de mes con negocios como tortillerías.
Luego de un par de horas de que el miedo se apoderara de los mencionados municipios, la Secretaría de Seguridad Pública de Michoacán finalmente reportó que todo estaba en orden. En un comunicado informaron que no hubo personas lesionadas y ya había un operativo para garantizar la seguridad de los habitantes.
“En coordinación con el Ejército Mexicano y la Guardia Nacional hemos desplegado un operativo en los municipios de Apatzingán, Buenavista y Uruapan, donde esta mañana personas no identificadas realizaron actos ilícitos”.
Un día antes se registró un enfrentamiento entre policías y delincuentes. Fue en el municipio de Gabriel Zamora y pasajeros de un autobús fueron testigos de la impactante escena. Dos criminales murieron y 5 policías terminaron lesionados.
No se puede confirmar si la quema de autos y tiendas en Apatzingán, Uruapan y Buenavista tiene alguna relación con esto, pues también se habla de que podría responder al problema del limón en esa zona.
Productores y jornaleros del limón llevan un par de semanas negándose a vender su producto debido a las extorsiones sin control del crimen organizado. Han recibido amenazas y ya se registraron algunos ataques contra camionetas de cortadores del fruto en la zona.