Por: Redacción Criterio Diario/ Foto: Reuters
Tanto Donald Trump como Joe Biden confían en la victoria en las elecciones presidenciales de Estados Unidos, ya que el resultado está en juego con ambos lados envueltos en una lucha legal por los votos.
El conteo de votos todavía se está llevando a cabo en estados cruciales que decidirán las elecciones.
Las victorias proyectadas en los estados de Michigan y Wisconsin de Rust Belt han acercado a Biden a la victoria y a medida que llegan los resultados, Trump ha desafiado el conteo de votos en estados clave.
El presidente ha hecho afirmaciones infundadas de victoria y acusaciones de fraude electoral, acusando a los demócratas de intentar “robar” las elecciones.
Biden, más prudente, no llegó a declarar la victoria pero dijo que confiaba en que estaba en camino de vencer a su rival republicano.
El candidato demócrata lidera actualmente en Nevada y Arizona, mientras que la brecha entre él y Trump se está cerrando a medida que el conteo continúa en Georgia y Pensilvania.
Se proyecta que la participación general en las elecciones del martes será la más alta en 120 años con un 66,9%, según el Proyecto Electoral de Estados Unidos.
Biden contó con el apoyo de 70,5 millones de votantes, la mayor cantidad ganada por cualquier candidato presidencial. Trump ha obtenido 67,2 millones de votos, cuatro millones más de los que obtuvo en 2016.
La amarga carrera electoral estuvo dominada por la pandemia de coronavirus, que alcanzó un nuevo récord de 103.000 casos diarios en los Estados Unidos el miércoles, según el Proyecto COVID Tracking.
Pero la economía, que se ha visto gravemente afectada por la pandemia, fue el tema más importante para los votantes, indicaron los datos de las encuestas de salida en las urnas.
¿Qué dicen las campañas?
Mientras continuaba la tensa espera por los resultados el jueves, ambas campañas dijeron que sus candidatos estaban en camino de ganar la Casa Blanca.
La directora de campaña de Biden, Jen O’Malley Dillon, dijo que los resultados iniciales parecían “muy positivos” para el ex vicepresidente pero pidió paciencia ya que el recuento de votos “va a llevar tiempo”.
“Nuestros datos muestran que Biden será el próximo presidente de Estados Unidos”, dijo O’Malley Dillon. “Ese conteo seguirá mostrando nuestro camino hacia la victoria”.
El director de campaña de Trump, Bill Stepien, parecía igualmente seguro de las posibilidades del presidente de ganar en Pensilvania y otros Estados. Esta perspectiva, dijo, se basó en “números y datos, no en instintos o giros”.
“Donald Trump está vivo y coleando”, dijo Stepien.
Sin embargo, a medida que Biden gana terreno, la campaña de Trump se dirige a los tribunales y ya entabló demandas y exigió un recuento en Wisconsin.
Trump ha intentado, sin pruebas, sembrar dudas sobre la validez de los votos contados después del día de las elecciones y enviados por correo. Contar las papeletas después del día de las elecciones es una práctica normal y legal en varios Estados.
¿Qué pasa con los desafíos legales?
La campaña de Trump ha iniciado una serie de demandas que exigen el cese de los conteos. Pero en Estados como Arizona y Nevada, donde Trump se encuentra marginalmente atrasado, sus partidarios exigen que continúe el conteo.
La campaña presentó una demanda en Michigan para dejar de contar allí porque sostuvo que se le había negado un “acceso significativo” para observar la apertura de las papeletas y el recuento. Un juez de la corte estatal desestimó la demanda el jueves.
En Detroit, Michigan, se llamó a la policía el miércoles por la tarde para vigilar las puertas de una instalación de conteo de votos, ya que algunos manifestantes del exterior exigieron acceso para monitorear el proceso. Según Detroit Free Press, ya había unas 200 personas observando la votación dentro del edificio.
La campaña de Trump también presentó una demanda en Pensilvania para presionar por un escrutinio más detallado del proceso de escrutinio. La demanda fue rechazada por la Corte Suprema de Pensilvania el jueves, informó Fox News.
El Presidente tiene una ventaja de tres puntos en el Estado de Keystone (Dakota del Sur) pero quedan muchos miles de votos por contabilizar.
Trump también ha iniciado acciones legales contra Georgia para detener el conteo de votos allí. Su campaña dijo que un observador electoral republicano en el estado sureño había sido testigo de la adición ilegal de 53 boletas de votantes ausentes tardíos a una pila de votos en el condado de Chatham. Una vez más, un tribunal estatal desestimó la demanda el jueves.
Y en Wisconsin, la campaña de Trump dijo que el presidente solicitaría formalmente un recuento, citando “irregularidades en varios condados de Wisconsin”.
Los resultados incompletos indican que el margen entre Trump y Biden en Wisconsin es de menos de un punto porcentual, lo que permite que un candidato busque un recuento.
Tal como están las cosas, Biden está por delante por más de 20.000 votos. Los expertos en elecciones dicen que los recuentos generalmente cambian los recuentos en solo unos pocos cientos.
El jueves, el Partido Republicano de Nevada confirmó el plan de la campaña de Trump para presentar una demanda alegando irregularidades en la votación en el Estado. La demanda alegará que alrededor de 10,000 votos fueron emitidos por personas que ya no viven en el estado.
En 2016, las victorias de Trump en Wisconsin, Michigan y Pensilvania sellaron su victoria y lo llevaron a la Casa Blanca.
En las primeras horas del miércoles, el presidente afirmó que había ganado las elecciones a pesar de que quedaban muchos votos sin contar. El discurso provocó fuertes críticas tanto de demócratas como de republicanos.
Trump también dijo que estaba preparado para llevar la elección a la Corte Suprema y su campaña pide a los donantes republicanos que ayuden a financiar los desafíos legales. Tales desafíos comienzan a nivel estatal, pero eventualmente podrían conducir al tribunal superior de los EE. UU.
La presidenta del Comité Nacional Republicano, Ronna McDaniel, dijo: “La lucha no ha terminado. Estamos en ella”.
La compañera de fórmula de Biden, Kamala Harris, tuiteó pidiendo a los partidarios que contribuyan con 5 dólares para ayudar a pagar un litigio que podría “prolongarse durante semanas”.
Bob Bauer, un abogado de la campaña de Biden, dijo que las demandas que la campaña de Trump ha presentado contra el conteo de votos “no tienen mérito”.
“Es para crear una oportunidad para que envíen mensajes falsos sobre lo que está ocurriendo en el proceso electoral”, dijo Bauer.
