Nos separó la muerte, pero el amor nos mantiene unidos…
Todos a lo largo de nuestras vidas tenemos muchos amores: el primer amor, al amor de estudiante, el amor de verano, el amor de la vida, el amor de invierno y el amor de otoño, ese que se da entre los 45 y 60 años. El que se vive con mayor madurez y con conocimiento de qué queremos en la vida y cómo lo queremos. Es el que más se disfruta pero también es el más difícil de encontrar. Se da al final de la escalera de la vida.
Se dice es el más difícil ya que encontrar una persona en ese promedio de edad la mayoría ya tiene una pareja estable con la que formo su vida, el catálogo para coincidir con alguien se vuelve muy reducido. El 90% de hombres y mujeres están casados, nos queda apenas un 9% de los cuales son viudos o divorciados, en un 1% quizás, algún soltero que será el mas exigente y difícil de conquistar.
Mucha gente siente pena de enamorarse a esa edad, consideran que son ridículos, serán criticados por la familia y quizás mal visto por sus amistades. Lo que si puedo decir es que para el amor no hay edad.
Cuando se sufre una pérdida de tu amor otoñal, es tan difícil pasar el duelo como haber encontrado un amor de otoño. Con un amor de otoño compartes toda la sabiduría que te han dejado los años y las relaciones que puedas tener a lo largo de la vida. Compartes y disfrutas más un paseo en el parque, sentarte a tomar un café, compartir una comida, ir al cine, etc. Simplemente disfrutas más la vida de la mano de tu amor.
Con esta pandemia mucha gente esta falleciendo y se han perdido muchos seres queridos de la manera más triste, sin poder despedirte o despedirlo como quisieras, como lo merece. Debes conformarte con enviar un beso al aire y elevar una oración para decirle adiós.
Este tipo de pérdidas es de las cosas más difíciles que experimentamos en la vida. El amor de otoño llega a tu vida cuando piensas que no volverás a amar y el hecho de irse, así de repente, es más difícil asimilarlo y superarlo. Pero uno debe de buscar ayuda especializada para llevar el duelo y poder seguir adelante sin tanto dolor y tristeza.
Uno debe seguir tranquila pensando que nuestro amor está ahí cuidándonos desde arriba sin dolor ni sufrimiento. El ya está tranquilo, ahora te toca a ti disfrutar la vida sin él, honrando su memoria, es decir, como quisiera el que tú sigas tu transitar por el mundo, ya sin ir tomados de la mano pero sintiendo que él sigue junto a ti cuidándote, acompañándote y guiándote.
Sé que pasará el tiempo y será difícil estar sin ti, especialmente para mí. Te extraño todos los días, y desearía que hubiera una forma de devolverte una última vez. Ni siquiera sé qué haría si pudieras volver. Tendría todo el tiempo para hablar contigo de cualquier cosa. Hay tantas preguntas que tengo para ti. Tengo tantos recuerdos de nosotros, y cada día desearía poder revivirlos de nuevo. A menudo me pregunto si sabías cuánto significabas para mí y siempre espero que te haga sentir orgulloso. Hay muchas cosas que no vamos a experimentar juntos y aún me parte el corazón. Me gustaría que estuvieras aquí para compartir mensajes y canciones
Espero que estés donde estés, descanses tranquilo y disfrutando de la “vida después de la muerte”. Te extrañaré hasta el día en que muera. Siempre estas presente en una canción, en un llamado del teléfono, en una frase que siempre decías, en cada palabra amorosa y llena de ternura que me decías mientras aún estabas aquí.
Normalmente no existe una guía para afrontar la muerte de un ser querido, no tenemos todas las respuestas ni soluciones, sin embargo existen una serie de pautas que pueden ser de gran valor para superar este trance.
Permitirse la tristeza y el dolor
No se asume una pérdida sino se afronta la realidad y esa es, sin duda dolorosa y triste. Los mecanismos naturales para la superación de una pérdida son sentir pena y dolor, en cualquier forma y escenificada de una u otra manera, pero de forma irremediable tanto la persona que ha sufrido la pérdida de su compañero sentimental como su entorno, deben permitir y permitirse la pena. Es humano y valido sentir tristeza y dolor por la pérdida.
Tiempo
No existe un tiempo determinado para asumir la pérdida, pero quién diría que el tiempo es la herramienta crucial para asumir este trance. Las prisas y la presión por parte tanto propia como del entorno del afectado no serán útiles ni recomendables en ningún caso.
Ni olvido ni negación
El primer estado de una situación de duelo, como es la muerte de tu amor de otoño, es la negación por lo tanto, esto es normal y está permitida en los primeros momentos de todo duelo. Sin embargo, ni la negación ni el olvido son las pautas que se recomiendan para superar este tipo de situaciones de forma saludable. Por el contrario, la aceptación y el recuerdo incorporado de forma natural a la vida son la solución deseada.
Ayuda profesional
Las situaciones más graves y profundas de duelo como la pérdida de la pareja, exigen apoyo tanatológico o psicológico para superar la situación de la mejor manera y con el menor sufrimiento posible.
Este conjunto de pautas o consejos conforman una Guía para afrontar la muerte de tu pareja, sencilla y básica, pero netamente práctica que coadyuvará con seguridad, a mejorar la situación y la tranquilidad, tanto de la pareja como de los familiares y seres queridos de la persona fallecida.
Hasta siempre mi amor de otoño.
En memoria de Edmundo…
Las Almas
Que se encuentran y se reconocen
Nunca se sueltan:
Ni con la distancia, ni con el silencio,
Ni con las vueltas
Que da la vida
Desconozco el autor
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