Leo a Eduardo Galeano

Angelica Lobato Torres Criterios

Primero que nada, quisiera disculparme por la ausencia de la semana pasada, el proceso logístico vacunador familiar, acabó conmigo y con el cambio de horario… Todo fue muy confuso. Pero estoy de vuelta en este bonito espacio quisiera contarles una bonita historia: 

No recuerdo si ya alguna vez les conté que en la librería donde trabajaba, varios de mis compañeros me juzgaban por leer cosas que ellos consideraban “banales”, si yo prefería leer “Bajo la misma estrella” de Nicholas Sparks a leer “Las venas abiertas de América Latina” del autor Eduardo Galeano. Mi explicación es que quería conocer lo que se vendía, por curiosidad más que por lo que yo pensaba era un libro que debía leer por obligación, ya que en especial este título de Galeano es uno de esos que cada año se vende exageradamente, lo cual se puede entender en el mundo librero como una lectura de escuela. Otro dato curioso de este título es que es uno de los libros que más se roban, en una ocasión nos dimos cuenta, que de un día para el otro faltaban más de 10 ejemplares, por lo cual se volvió un libro resguardado y para contar el chisme completo les diré que una sola persona se llevó todos esos ejemplares. (Si gusta conocer el modo y creo a los culpables busquen en YouTube “Ladrones de libros en librería de la BUAP”. En este video no sé qué título se hayan llevado). 

Sin embargo, la curiosidad ganó y quise averiguar cuál era el encanto de este libro y puedo decir que a unos les causa más curiosidad que a otros. En mi nota sobre los libros de fútbol, ya les hablé de Eduardo German María Hughes Galeano. Este escritor y periodista uruguayo es un referente en toda Latinoamérica debido a sus opiniones políticas de naturaleza izquierdista. Fue censurado por las dictaduras Uruguayas, Argentinas y Chilenas; y el libro causó algo de revuelo 38 años después de su lanzamiento cuando Hugo Chávez le regalo una copia a Barack Obama. Muy curioso su regalo al saber de qué va el libro. 

“Las venas abiertas de América Latina” nos da a conocer la opinión que el autor tenía sobre la sumisión que los países latinos han sufrido a través de la historia primero por los conquistadores y por diferentes naciones de diferentes formas. El libro consta de 2 partes. La primera parte llamada: “La pobreza del hombre como resultado de la riqueza de la tierra” nos da un recorrido por la América recién descubierta y el inicio de la explotación de los territorios conquistados primero buscando metales preciosos, con el tiempo países como Cuba, fueron explotados por sus recursos como el azúcar. La segunda parte: “El desarrollo es un viaje con más náufragos que navegantes” en que se habla de América siendo explotada por los países más poderosos del mundo. 

El libro es difícil de leer. En mi caso, le tengo un poco de rechazo a los libros “rojillos”, se me hacen un poco victimistas y que la gente que los lee sólo están buscando una excusa para quejarse de la opresión que vivimos, que aunque es verdad la sufrimos como algo “normal” por no ser conscientes de ello, la mayoría de los rojillos que conozco les gustan muchas cosas “capitalistas”. El libro es como un cachetadon de historia a cada uno de los habitantes de Latinoamérica, te abre los ojos a como países se aprovechan y explotan a otros y se vanaglorian de haberlos sacado de la oscuridad en la que vivían antes de ellos. Como sin estos países explotados las grandes potencias nunca hubieran logrado todos sus avances pero sobretodo, este es un ciclo que jamás podrá romperse. 

Creo que este es un libro que todos deberíamos leer, aunque en mi opinión sólo hará que le tengamos un poco de resentimiento a la situación en la que vivimos. En pequeña escala, todos somos la América Latina de alguien más. 

angelica.lobato@criteriodiario.com