Los resultados de CONEVAL como agenda de tres años

Criterios Paul Bonilla

No podemos pasar de lado la presentación de los resultados que emitió el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social para el año 2020 (CONEVAL), podrá ser cierto que esta medición cuenta con el factor de la pandemia que nos ha tenido ya casi dos años envueltos en problemas de salud pública, se podrá excusar que el momento de presentación de las estimaciones de pobreza multidimensional 2020 son para atacar al gobierno y que las circunstancias en las que vivimos son causa de gobiernos anteriores. Lo real es que, con base a este trabajo, se debe desarrollar toda una serie de replanteamientos estatales y locales, de lo que se debe hacer en el estado de Puebla.

Al ser presentado los datos de pobreza que reflejó lo acontecido en el año 2020 y previo al cambio de gobiernos municipales, congresos locales y cámara de diputados federal, el estado de Puebla tiene en sus manos la capacidad de revertir las cifras, siempre y cuando las partes políticas entiendan la coyuntura que se vivirá nuestro estado por lo menos tres años más, y esto debido a que durante el segundo trienio de un sexenio presidencialista (México para ser específico) comienza a navegar la sucesión presidencial, comienzan a desfilar los nuevos protagonistas del relevo del ejecutivo federal y que tendrá que hacer cara a los efectos colaterales de la pandemia, puesto que para 2024, será uno de los temas mas concurrentes, el estancamiento económico, el retroceso en materia de salud, el decrecimiento del PIB, etc. 

Vale la pena hacer mención que solo hablaremos sobre aquellos datos en los que los ayuntamientos, el congreso local y el gobierno estatal deben estar más al pendiente y atender bajo un esquema de cooperación económica y de políticas públicas, ya que independientemente que el Plan Nacional de Desarrollo es la estructura base para los gobiernos sub nacionales (estado y municipio) la atención prioritaria en cuanto a la pobreza focalizada puede ser resuelta desde el consenso interior de Puebla. 

Vayamos a los datos, el estado de Puebla en cuanto a la población en situación de pobreza sufrió un incremento de 58.0 % en 2018  a 62.4% en 2020, mientras que en los mismos años, la pobreza extrema pasó de 8.1 % a 12.7% (un incremento del 4.6 por ciento), lo cual evidencia las complicaciones que se tienen derivado de la pandemia y las repercusiones que se están presentando en pleno 2021, una de las más altas tazas, es el incremento de población con carencia por acceso a los servicios de salud pasando de 20.8 por ciento a 32 por ciento (2018 a 2020) sin embargo Puebla es uno de los estados por debajo de la media nacional (12 por ciento); en cuanto a carencia por acceso a la alimentación nutritiva y de calidad, el porcentaje se incrementó de 24.5 por ciento en el año 2018 a 20.8 por ciento en el año 2020, estando muy por encima de la media que es de 0.3 por ciento entre esos dos años en todo el país, los ingresos no son la excepción, para el año 2018, Puebla se encontraba con un ingreso inferior a la línea de pobreza extrema de 17.8 por ciento, mientras que para 2020 se incrementó a 26.2 por ciento (8.4 superior).

Independientemente del trabajo realizado por el gobierno federal, las acciones realizadas durante la presente administración estatal han establecido un cambio en positivo en cuanto a cifras, en cuanto a carencia en los servicios básicos se ha reducido el porcentaje en carencia en acceso a los servicios básicos en la vivienda, algo que estados como Durango o la capital del país incrementaron muy por encima de la media nacional, igualmente pasa con la carencia por calidad y espacios de la vivienda donde el estado se encuentra pasando de 2018 con un porcentaje de 11.7 por ciento a 10.4 por ciento en el año 2020 y encontrándose muy cerca de la media nacional, lo que evidencia el trabajo en este rubro, finalmente el estado de Puebla redujo en 1.8 por ciento de 2018 a 2020, la carencia por acceso a seguridad social y que la encuentra muy cercana a la media nacional que es de 1.4 por ciento. ¿Hacia donde llevar los próximos 3 años estos temas? Hacia la mejora y crecimiento de los espacios de salud en el interior del estado, más plazas de trabajo para el sector de la salud, incremento de políticas, programas y acciones sobre alimentación en colaboración entre gobierno estatal y ayuntamientos, factor clave para el desarrollo infantil y por último la atracción de inversión nacional y/o extranjera para el desarrollo y explotación del trabajo poblano, base de la economía social, así mismo el apoyo al campo e inversión económica en su rescate, lo cual puede trabajarse desde reformas a las leyes locales así como a nuevos programas municipales y adecuación de programas estatales en la materia.

¡Hasta pronto!

paulbonillatransparencia@outlook.com