Por: Redacción Criterio Diario / Foto: Twitter @periodistan_
En una conferencia de prensa en el Pentágono, el general de la Marina, Frank McKenzie, jefe del Comando Central de Estados Unidos, el ataque con drones a Kabul y aseguró que en el evento murieron varios civiles en Afganistán, y no un extremista del Estado Islámico como se informó inicialmente.
Días después del ataque en Kabul, que tuvo lugar el 29 de agosto de este año, los funcionaros el Pentágono afirmaron que se había llevado a cabo correctamente, a pesar de que 10 civiles murieron, entre ellos siete niños.
Las organizaciones de noticias pusieron en duda esa versión de los hechos, e informaron que el conductor del vehículo atacado era un empleado de una organización humanitaria estadounidense desde hacía mucho tiempo, además de señalar la ausencia de pruebas que apoyaran la afirmación del Pentágono de que el vehículo contenía explosivos.
McKenzie dijo que “el ataque fue un trágico error” y que el vehículo fue atacado “en la creencia sincera” de que representaba una amenaza inminente. Posteriormente, McKenzie se disculpó por el error y dijo que Estados Unidos está estudiando la posibilidad de pagar una indemnización a la familia de las víctimas.
Tras las declaraciones de McKenzie, el general Mark Milley, jefe del Estado Mayor Conjunto, expresó su pesar y mencionó: “ésta es una horrible tragedia de guerra y es desgarradora”, dijo Milley a los periodistas que viajaban con él por Europa. “Estamos comprometidos a ser totalmente transparentes sobre este incidente”.
