Duelo y adaptación…
Muchos de nosotros hemos tenido que cambiar de puesto de trabajo o dejado de trabajar. Cuando cambiamos de puesto siempre es por un ascenso o por crecimiento personal. Es volver a adaptarse al nuevo puesto, salimos de nuestra zona de confort y esto nos provoca muchos cambios. El primero y más fuerte es estar ante algo nuevo y desconocido para nosotros, aunque se tiene el conocimiento para realizar las tareas, a esto se le suma tener una nueva ubicación física, nuevo jefe, nuevos compañeros de trabajo y nuevas tareas a realizar. Salimos de nuestra cotidianidad a cumplir nuevas tareas, entramos en un duelo por la pérdida de lo que ya teníamos y manejábamos a la perfección y ahora nos enfrentamos a una adaptación de las nuevas tareas a realizar.
El cambio personal tiene dos dimensiones. Una asociada a las circunstancias, condiciones y ambiente que cambia para la persona, que se refiere a lo estructural. La otra dimensión del cambio personal es el componente interpersonal, la respuesta psicológica, que tiene que ver con el proceso de adaptación a la nueva realidad.
Lo estructural (los acontecimientos). Nuevo trabajo, nuevo jefe, nuevo sistema.
Lo psicológico (la respuesta). Proceso de adaptación a la nueva situación.
El cambio transcurre de una forma más rápida y expedita en el ámbito organizacional (estructura, sistemas, procesos, etc.), pero de otra forma más gradual y personal a nivel de las personas (emociones, percepciones, creencias). Es adaptarte a un nuevo lugar físico a compartir con nuevos compañeros de trabajo y nuevo jefe. Hasta que poco a poco vayamos dominando nuestras nuevas tareas y acoplándonos a el nuevo ambiente físico e intelectual que nos rodea.
Vamos a ver en forma individual cada proceso y sus afectaciones. El cambio es un evento contextual externo y relativamente rápido; un evento que se puede percibir e inclusive cuantificar. El cambio se muestra en resultados concretos, como un cambio en la economía, cambio de puesto, la pérdida de un ser querido, la pérdida de la salud ante una enfermedad grave que se manifiesta.
La transición es el proceso psicológico individual interno por el que pasan las personas para aceptar la situación nueva, estos según Bridges. Este es un proceso muy personal. Al respecto comenta Willian Bridges: “La transición se requiere para vivir, asimilar y manejar los cambios”. La transición según laconsultora empresarial Ela García: “Es progresiva, puede ser inconsciente, y casi nunca se produce en forma lineal, ni siempre se siente o percibe como un avance”.
Todos los seres humanos somos muy renuentes al cambio y nos resistimos, desde mi punto de vista esa resistencia es por miedo a algo nuevo aunque se tenga la preparación y el conocimiento para realizar la actividad el hecho de no saber que se va a realizar y llegar a conocer nuevas tareas provoca esa incertidumbre. La resistencia al cambio es una reacción defensiva, un comportamiento que busca proteger algo. En consecuencia, más que “vencer” la resistencia.
El cambio llega y se instala como situación estructural y externa, como cuando la economía entra en recesión o muere inesperadamente un cónyuge o hijo; pero el proceso de aceptar esa realidad, y recomponerse la persona para aceptar y adaptarse a esa nueva situación, es un proceso más lento y menos evidente, en el que la persona transiciona a esa nueva realidad.
Cualquier trabajador afectado por el cambio adopta una actitud concreta frente al proceso. Lawrence Polsky identifica cinco actitudes y ofrece consejos para enfrentarse a ellas:
Primera fase del cambio: Precontemplación. Es la etapa en la cual las personas no tienen intención de cambiar, de realizar una acción específica de cambio en su comportamiento. Tienen la propuesta o la información de una vacante pero aun no se toma la decisión de tomarla.
Segunda fase del cambio: Contemplación. La persona considera y rechaza el cambio a la vez, se siente ambivalente. Aunque es consciente del problema, la balanza que recoge los motivos para cambiar y los motivos para continuar igual está muy equilibrada.
Tercera fase del cambio: Preparación. También llamada etapa de “Determinación”. Vas informándote y empapándote de todo lo que se hace en el nuevo puesto en algún momento se hace una visita al lugar donde vamos a estar ubicados físicamente y conocemos a laos compañeros de trabajo, jefes, supervisores, etc. Ya está uno dentro sin tomar aun la rienda total del nuevo puesto
Cuarta fase del cambio: Acción. Tomas el toro por los cuernos e inicias la observación y la acción ya en el campo laboral aplicando los conocimientos. Estamos dentro con todo listo para aprender y aplicar conocimientos.
Quinta fase del cambio: Mantenimiento. En esta etapa ya conoces las tareas a realizar y ya entraste de lleno en la organización y tiempos para poder realizar el trabajo.
En esta vida debemos arriesgarnos al cambio para lograr obtener algo mejor, es muy normal sentirse o estar en duelo por la pérdida de la zona de confort y sentirse perdido ante la nueva oportunidad, que sabe uno que tiene el conocimiento, pero no deja de ser una zona desconocida a la que se llega para poner en práctica los conocimientos y la experiencia laboral con la que ya se cuenta. Debemos arriesgarnos para ganar y poder tener algo mejor tanto de manera económica pero lo más importante en el desarrollo profesional y experiencia laboral que adquirimos.
La vida te ha dado una nueva oportunidad. Agárralo y pruébalo. ¡Te lo mereces totalmente!
Página en FB www.facebook.com/tanatologiaadiosalduelo
Instagram @marthatanatologa