Como ustedes sabrán, en este fin de año si podemos decir: “podríamos estar peor” y para imaginarlo sólo tenemos que ver la situación de Perú con su líder popular Pedro Castillo, el cual ahora es expresidente y está en la cárcel; no le deseo mal a nadie, pero a veces nuestro propio Tlatoani se merece un cachetadon por decir cosas que causan controversia.
En una de sus mañaneras de la semana pasada criticó al escritor peruano Mario Vargas Llosa que, al igual que nuestro líder, se destaca por sus “interesantísimas” opiniones, en especial cuando se habla de política y ni mencionemos el lenguaje inclusivo. López Obrador dijo “que está en todo lo que tiene que ver con apoyar al conservadurismo.”
“Lee uno una página de una de sus novelas nuevas recientes y no aguanta el sueño, es como un Tafil, es como tomarse un Tafil, bosteza uno mucho, aburre, porque cuando se entrega una gente, un escritor a la mentira pierde la imaginación, pierde el talento”.
Lo que el Presidente no se da cuenta es que una crítica de este tipo tiene efectos varios, sus seguidores tal vez quieran leerlo para poder criticar al peruano; los que no lo apoyan investigaran sobre este camarada y posiblemente lean también alguno de los libros.
El Presidente aseguró que antes “escribía bien”, tanto así que el libro que más le gusta “La fiesta del chivo”, donde aborda los últimos momentos del dictador dominicano Rafael Leónidas Trujillo, más o menos a inicios de los 60’s. La historia se cuenta desde 3 lineas diferentes, primero la de Urania, hija del senador Agustín Cabral, que luego de 35 años regresa a República Dominicana a reencontrarse con su padre y para darnos el punto de vista de las mujeres en la dictadura que sufrían el machismo caribeño del “Chivo”, apodo de Trujillo; los padres regalaban a sus hijas al Benefactor de la Patria, el cual también humillaba a sus colaboradores al acostarse con sus mujeres.
La segunda línea es la reconstrucción de una carretera en las afueras de Ciudad Trujillo, nombre impuesto a la antigua Santo Domingo. Antonio de la Maza, Amado García Guerrero, Salvador Estrella Sadhalá, Tony Imbert, Huáscar Tejeda, Pedro Livio Cedeño y Fifí Pastoriza, todos ex trujillistas, han asumido la misión de ajusticiar al Padre de la Patria Nueva, ya que el asesinato de Trujillo es la única salida para rescatar al país del estado de miedo y corrupción en que ha caído.
La tercera es la voz y conciencia del dictador dominicano y la relación que establece con sus colaboradores más cercanos, entre ellos, el jefe del temido Servicio de Inteligencia Militar (SIM) Johnny Abbes; el senador Henry Chirinos, Joaquín Balaguer, experto en artimañas jurídico-constitucionales; el ministro de las Fuerzas Armadas, general José René Román, y el presidente del Senado, Agustín Cabral, “Cerebrito”, caído en desgracia a pesar de entregar 30 años de su vida a la defensa de la obra del Benefactor.
Vargas Llosa hizo una investigación sobre la “Era de Trujillo” que duró más de tres años de documentación de una dictadura capaz de penetrar en las conciencias, y hasta en los sueños de los ciudadanos, pero su “Trujillo” es una invención, por más que esté avalado por su investigación, tenía que buscar la manera de justificar el porqué de las atrocidades y arbitrariedades cometidas por un dictador, no podía ser la “verdad” que se conoce.
“La Fiesta del Chivo” es una obra realista, que cuestiona el poder, sobre los límites a los cuales puede llegar un hombre que acumula una fuerza incontrolable y a una sociedad que se lo permitió.
“Luego de tantos años de servir al Jefe, habías perdido los escrúpulos, la sensibilidad, el menor asomo de rectitud. Igual que tus colegas. Igual que el país entero, tal vez. ¿Era ése el requisito para mantenerse en el poder sin morirse de asco? Volverse un desalmado, un monstruo como tu Jefe”.
No es casualidad que este libro salga a colación con la situación de Perú y con la situación de nuestro país ¿no lo creen? Creo más de uno de los involucrados en la situación necesita un Tafil o varios; dios sabe que yo si lo tomaré en año nuevo y esperare que el 2023 sea mejor, dios sabe que no podría ser peor, les amo.
