Los muros inciertos.

Angelica Lobato Torres Articulos Criterios

La máquina de hacer libros lo ha hecho de nuevo y tenemos un nuevo libro de Haruki Murakami, que el describe como “Una novela melancólica y filosófica sobre un amor perdido, sobre la identidad y el autodescubrimiento”, esta novela se llama “La ciudad y sus muros inciertos”.

La novela relata la historia de un joven que durante un concurso escolar conoce a una chica, de quien se enamora y después desaparece de su vida. Sin embargo, durante las pocas veces que se vieron, ella le confesó que “su verdadero yo” se encontraba realmente en una misteriosa ciudad amurallada.

De pronto, entrado el otoño, el protagonista recibe una carta de ella que quizá suponga una despedida, y eso lo sume en una profunda tristeza. Tendrán que pasar años antes de que pueda atisbar alguna posibilidad de reencontrarla.

Tras algún tiempo se da cuenta de que esa ciudad sí existe y decide ir en busca de su enamorada, “porque todo es posible en este asombroso universo donde la realidad, la identidad, los sueños y las sombras fluctúan y escapan a los rígidos límites de la lógica”.

La fantasía y lo real se funden y confunden, los sueños y las sombras tienen un lugar esencial y el amor es el motor que guía a los personajes. La novela, de casi 600 páginas, se estructura en tres partes y un breve epílogo. Los críticos de otros países que ya han podido leerla han señalado que el japonés nos muestra sus mejores herramientas para dar forma a una obra de altura.

“La ciudad y sus muros inciertos” se centra en exploraciones profundamente humanas, tratando temas como un amor que se ha perdido, el proceso de hallar la propia identidad, y la búsqueda del autodescubrimiento.

Por este trabajo, Murakami ha recibido premios como el Noma, el Tanizaki, el Yomiuri, el Franz Kafka, el Jerusalem Prize o el Hans Christian Andersen, y su nombre suena, como ya es costumbre, como candidato al Nobel de Literatura.

Murakami empezó a reescribir el libro en marzo de 2020, poco después de que el Covid-19 empezara a extenderse por todo el mundo, y lo terminó dos años después, cuando la guerra en Ucrania superaba el primer aniversario. “Los dos grandes acontecimientos se combinaron y cambiaron el mundo de forma dramática”.

Todas sus novelas giran alrededor de algún tipo de hecho desconocido que desconcierta al protagonista. El encanto consiste en acercarse a la respuesta, página por página, hasta que te das cuenta de que la resolución no es lo más importante, sino como se llega hasta ella. Ha escrito historias realistas y otras surrealistas pero en una forma que llama a seguir leyendo, como si el autor colocara una atractiva recompensa justo en frente de tus narices, y te reta a que lo persigas.

La mayoría de sus historias son surrealistas, vas a sentir un miedo a lo desconocido, algo así como que nadie está seguro. Que lo blanco puede ser negro de un momento a otro o viceversa. Porque las “reglas” de esas otras realidades no están escritas, sino que son como un torbellino en constante movimiento.

“La ciudad y sus muros inciertos” nació de un cuento que escribió en los 80´s “Ha supuesto para mí un alivio enorme, como si hubiera conseguido arrancarme una espina clavada… Era una espina que para mí significa mucho (tanto en lo profesional como en lo personal) Abordar la rescritura de aquella obra me ha permitido revivir los escenarios en que se desarrollaba y volver a habitar aquella ciudad, 40 años después de su concepción”.