La importancia de llorar bien y disfrutarlo
Hace unos días alguien pedía en sus redes que le recomendaran una buena serie o video para llorar. De entrada, me pareció algo rara esta petición, pero poco tardé en detenerme a pensar y reflexionar acerca de lo reconfortante que puede llegar a ser el tener una buena sesión de llanto, sobre todo si viene acompañada de una gran historia.
Desde que era pequeño pude descubrir la sensibilidad ante una película, un libro o incluso una canción al poder experimentar y vivir sentimientos a flor de piel a través de lo que me pudieran contar.
Hoy en esta entrega del Jolgorio del Ocio, me gustaría hablarles acerca de “This is Us” (Prime Video) una serie con la que he tenido una relación complicada, pero a la vez única y probablemente irrepetible. Cuando digo “irrepetible” es tal vez porque en definitiva no es una serie que me gustaría ver una y otra vez, ya que representaría un reto emocional significativo. Pocas series logran atraparnos cambiando la historia y el rumbo de los personajes sin que perdamos el interés y “This is Us” lo logra.
Recuerdo perfectamente el primer episodio en el que sin saber bien ni entender a dónde iba a llevarme el viaje que estaba emprendiendo con la familia Pearson, decidí quedarme y no bajarme hasta poder reír y llorar (y volver a llorar cada dos por tres) con todas y cada una de sus vivencias. Rebecca y Jack son dos jóvenes enamorados que aparentemente tienen todo en su contra. Ella es una niña “bien” con sueños de ser una gran cantante y él es un exsoldado que recién ha regresado de la guerra. Familias distintas y caminos que nada pueden tener en común pero que desde el primer momento nos invitan a aventurarnos en su historia pese a todas las adversidades.
Posteriormente conocemos a los nuevos integrantes de esta familia. Kevin, Karen y Randall, tres hermanos que nacieron casi al mismo tiempo… (así tal cuál como dice la canción). Es entonces cuando la verdadera historia empieza a despuntar. Vemos el crecimiento de todos los personajes y no podemos evitar identificarnos con sus características y con cosas que les suceden. Me parece muy interesante la manera en que llegas a sentir que tienes algo de cada uno de ellos.
El director y los escritores juegan constantemente con el tiempo y el espacio. Justo cuando crees que ya no regresarás a ciertas épocas o circunstancias, vuelven a transportarte y te sorprenden con algo totalmente inesperado que te deja con ganas de saber más. Podemos ver todas nuestras etapas de vida reflejadas en esta historia. El primer gran amor, nuestro primer día de clases, aquella excursión que hicimos con nuestra familia en la que algo especial ocurrió y que seguiremos recordando siempre, pero de igual manera, la primera desilusión o aquella vez en la que nos sentimos humillados por alguna persona o situación.
He tenido una relación complicada con “This is Us” porque en ocasiones he llegado a sufrir demasiado con la historia al punto de tener que parar y dejar de verla. En eso de la nada, algo pasa que me hace volver y una vez que regreso, no puedo parar hasta terminar la siguiente temporada.
Confieso que puedo ser un llorón extremo en cuanto a películas y series se trata, pero curiosamente es algo que disfruto mucho y especialmente si me encuentro solo. Una buena dosis de llanto puede servir de gran catarsis en diferentes situaciones que estés atravesando en tu vida y sin duda alguna, con esta serie lo he logrado varias veces ya.
Respondiendo a aquella publicación y de paso a todos aquellos que al igual que nosotros disfruten de una sesión con una gran carga emocional que te haga “llorar bien”, no dejen de ver esta maravilla de serie. Se recomienda tener a la mano una buena cantidad de pañuelos desechables y una libreta para poder tomar nota de grandes canciones que forman parte de la banda sonora, canciones que no recordábamos y vamos a querer escuchar otra vez.
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