La región de las burbujas

Criterios Laura Góngora

México Vinícola

El lenguaje es vino en los labios

Virginia Woolf

México es un país vitivinícola pese a que gran parte de su territorio no se encuentra dentro de las franjas del vino. Contamos con microclimas que favorecen la plantación de Vitis Vinífera a lo largo del territorio nacional. Para muestra un botón, hoy son 14 los estados productores de vino en nuestro país y cada uno de ellos cuenta con peculiaridades que resaltan el carácter de su tierra.

La región vinícola más al Sur del hemisferio norte la tenemos los mexicanos y es el hermoso estado de Querétaro, iniciando sus actividades en 1942 y consolidándose como el mayor productor y exportador de vino espumoso del país.

Hemos hablado sobre el tipo de clima para la óptima maduración de la vitis, este debe ser un tanto extremo, con cambios de temperatura bruscos entre temporadas o bien entre el día y la noche y por lo regular poca agua. Querétaro es un estado a términos muy estrictos que no cuenta con lo idóneo para nuestra protagonista, ya que no podemos referirnos a esta entidad como extrema en cuando a clima se refiere, es más bien un lugar bastante privilegiado casi todo el año, claro, para la vida de los seres humanos, pero para estas plantitas dicha situación solo favorece que su siembra, maduración y cosecha sean ahora si al extremo.

Los riesgos con los que corre nuestra región son altos, granizos constantes, lluvias veraniegas abundantes y sus suelos calcáreos hacen que el arte de producir vino sea realmente maratónico.  Esta misma extremidad imprime un carácter muy especial en los caldos, logrando colocarse en concursos internacionales y regresar bastante bien parados. Actualmente son 11 los municipios que elaboran vino en Querétaro, sobresaliendo la zona semidesértica de Tequisquiapan.

Hablando honestamente yo no puedo decir que sus vinos tintos son muy buenos (alguno habrá seguramente) y no porque el proceso no sea de lo mejor, me queda claro que lo es, sin embargo, el terruño no da para mucho más. Recordando que el 80% de un buen vino viene de la tierra, siendo esta no tan apta para su producción, solo nos queda un 20% para solucionarlo en el laboratorio y a veces esto no es suficiente. Enfocarse en las fortalezas y no en sus debilidades es el camino al éxito que ha tomado esta región explorando un área poco explotada en el país; los vinos espumosos.

En general este tipo de fermentado va muy adornado por la burbuja que le regala belleza refrescante y divertida, con lo que es difícil juzgar un vino espumoso de forma muy objetiva. Simplemente la burbuja nos enamora, la región sabe esto y ha decidido colocar sus esfuerzos donde sean mejor remunerados y aprobados; en la elaboración de los mejores espumosos o bien solo de espumosos frescos y con chispa.

Es así como hoy se colocan como una de las regiones más importantes para el país en la materia. Es aquí donde se realiza año con año uno de los festivales más importantes, 100 vinos mexicanos, organizado por una vinícola que, si bien no destaca por sus grandes vinos, si lo hace por la forma magistral de organizar eventos épicos dentro del ámbito.

Las principales cepas que se plantan en esta región son: Merlot, Syrah, Malbec, Marselan, Tempranillo, Cabernet, Chardonnay, Sauvignon Blanc y Xare-lo.

Vino, Arte y queso son tres espectaculares productos que te ofrece el estado en su tan afamada ruta del vino, no dejes de hacerlo cuando lo visites. También te recomiendo visitar Finca Sala Vivé para probar sus vinos y tomar unas lindas fotos y por supuesto asistir a una vendimia de La Redonda por su muy buen espectáculo.

¡Consume vino mexicano!

¡Salud!

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