En la ciudad de Puebla se tienen tantos templos que muchas leyendas han nacido alrededor de ello, que si competimos con Cholula en la leyenda que tenemos 365 iglesias, que si son 365 torres, 365 campanas, en fin, un sinnúmero de historias que se han integrado al imaginario de los que habitan la ciudad de Puebla.
Lo que si es cierto es, que en la antigua calle del Corazón de Jesús (ahora 9 Norte) se erigió en el siglo XIX un templo dedicado al Sagrado Corazón (por ello la calle llevaba ese nombre), así como un convento de religiosas, anexo al templo; fue la orden de la Merced quien se quedara al frente del templo. Curioso ya que anexo al templo dedicado al Sagrado Corazón de Jesús, se incluyó un espacio dedicado al Dulce Corazón de Marìa.
Dicho espacio fue decorado con imágenes pintadas de las diversas advocaciones Marianas, alrededor de 300 de ellas, que presentan debajo de la imagen su nombre y en ocasiones el patronazgo de las mismas.
Quizás en decorado, las imágenes no presentan los grandes marcos barrocos que en otras iglesias se tienen, pero la estructura de esta pequeña capilla presenta al observador un gran panorama donde se tiene un universo de imágenes y cada una diferente de otra.
El reto que presenta este espacio es el celo con el cual se guarda, ya que no es una capilla que se tenga abierta al culto de manera común, aunque si hay fechas especiales en las que los encargados del templo la abren para las ceremonias religiosas, no es habitual el encontrarla disponible para visita.
Así que es un tesoro bien guardado de la ciudad de Puebla y que si de casualidad andan por el rumbo del Parral, y ven abierto este espacio sin duda, vale la pena visitarlo para aprender un poco más de la historia de la ciudad, y admirar la representación de las advocaciones Marianas que en muy pocas ocasiones se presentan de esa manera.
